Aviso de Publicidad COFEPRIS: 2509132002A00162
Valoración integral para detectar y tratar enfermedades del corazón como hipertensión, arritmias, insuficiencia cardíaca, colesterol alto y más.
Estudio no invasivo para registrar la actividad eléctrica del corazón y detectar alteraciones en ritmo o funcionamiento cardíaco.
Procedimiento diagnóstico e intervencionista para visualizar arterias coronarias, medir presiones y tratar obstrucciones.
Evaluación del riesgo cardiovascular antes de una cirugía, con enfoque preventivo y recomendaciones médicas precisas.
Ultrasonido del corazón que permite evaluar su estructura, función, válvulas y flujo sanguíneo en tiempo real.
Tratamiento mínimamente invasivo para abrir arterias bloqueadas del corazón y restaurar el flujo sanguíneo, mediante balones y stents.
Los dolores en el pecho pueden tener muchas causas, desde indigestión hasta un ataque al corazón. Un cardiólogo te preguntará sobre la duración, intensidad, y si el dolor se extiende a otras partes del cuerpo, como el brazo o la mandíbula. También podría preguntar si otros síntomas como dificultad para respirar, sudoración fría o náuseas lo acompañan. Es vital no ignorar estos síntomas y buscar atención médica para un diagnóstico preciso.
Las enfermedades del corazón a menudo se asocian con factores de riesgo como la hipertensión, el colesterol alto, la diabetes, el tabaquismo y la obesidad. Un cardiólogo evaluará tu historial médico y estilo de vida para identificar estos factores. Te dará recomendaciones personalizadas sobre dieta, ejercicio, medicación y cambios en el estilo de vida para ayudarte a reducirlos.
Dependiendo de tus síntomas y factores de riesgo, un cardiólogo podría recomendarte varias pruebas para evaluar la salud de tu corazón. Las pruebas comunes incluyen:
Electrocardiograma (ECG): Mide la actividad eléctrica del corazón.
Ecocardiograma: Es un ultrasonido que crea una imagen del corazón.
Prueba de esfuerzo: Evalúa el corazón mientras haces ejercicio.
Análisis de sangre: Para medir los niveles de colesterol, triglicéridos y glucosa.
Un cardiólogo te dirá que la prevención es la clave. Te aconsejará adoptar una dieta balanceada, rica en frutas, verduras y granos enteros, practicar ejercicio regular (al menos 150 minutos de actividad moderada a la semana), mantener un peso saludable, controlar el estrés y, si eres fumador, dejar de fumar. Estas medidas son fundamentales para prevenir enfermedades cardiovasculares.